viernes, 29 de abril de 2011

ESQUEMA PARA COMENTAR TEXTOS NARRATIVOS

ESQUEMA PARA COMENTAR TEXTOS NARRATIVOS

COMENTARIO DE TEXTOS NARRATIVOS


1. NARRADOR:

Participación en la historia

NARRADOR EXTERNO: es aquel que cuenta hechos en los que se supone que no ha participado como personaje y, por tanto, se limita a narrarlos desde fuera (en 3º persona)
NARRADOR INTERNO: el  narrador es uno de los personajes que participa en la acción
NARRADOR- TESTIGO
NARRADOR- PERSONAJE SECUNDARIO
NARRADOR-PROTAGONISTA

Perspectiva temporal

NARRACIÓN EN PRESENTE (ACTUAL)
NARRACIÓN EN PASADO (RETROSPECTIVA)
NARRACIÓN EN FUTURO (PROSPECTIVA)

Dominio de la historia

NARRADOR OMNISCIENTE: lo sabe todo sobre el universo novelesco y domina en el relato como una especie de “dios” de la ficción creada por él. Conoce la historia anterior y el destino de todos los personajes, puede penetrar en su interior y descubrir al lector todas las facetas de su personalidad y sus pensamientos o deseos más ocultos. Este completo conocimiento de la historia le permite controlar la narración a voluntad (puede interrumpir el relato para insertar explicaciones de los hechos, referencias a acontecimientos pretéritos o futuros, e incluso juicios sobre los personajes). Normalmente aparece asociado al punto de vista externo, aunque a veces aparece asociado a un narrador interno.
NARRADOR IDENTIFICADO: es un narrador interno o externo que mantiene cierta omnisciencia con respecto a un solo personaje (se identifica con él y reduce sus explicaciones de la historia a lo que este conoce)

PERSPECTIVA ÚNICA


PERSPECTIVA MÚLTIPLE
NARRADOR OBJETIVISTA: intenta ocultarse, desaparecer casi de la narración, dando la impresión de que no conoce de la historia nada más que lo que puede ver de ella en el momento en que se produce (cámara de cine)

Intervención en el relato

NARRADOR SUBJETIVO
NARRADOR OBJETIVO



2. ACCIÓN: Llamamos acción a la recreación narrativa en una secuencia lineal de los hechos sucedidos o imaginados. En este sentido, hay que distinguirla de la historia, que sería el orden real de los acontecimientos según los principios de la causalidad y el orden cronológico. Partiendo de esta historia, externa a la narración, el narrador construye la acción, concebida así como el conjunto de episodios narrados de forma sucesiva, en un orden que puede coincidir o no con el de la historia.

a) Esquema clásico de la estructura de la acción

PLANTEAMIENTO

NUDO

DESENLACE

-          Situación en el espacio y en el tiempo.
-          Presentación de los personajes.
-          Acontecimientos que conducen al conflicto.
-          Episodios que desarrollan el conflicto.

-          Resolución del conflicto.



b) Esquema de narración in media res

NUDO

DESENLACE

-Episodios que desarrollan el conflicto.
- Referencias a acontecimientos anteriores que permiten entender el origen y el sentido del conflicto
- Resolución del conflicto


 c) Esquema de narración in extrema res

SITUACIÓN FINAL
NARRACIÓN LINEAL:  PRESENTACIÓN-NUDO-DESENLACE


3. TIEMPO:

a) Tiempo externo: se refiere a la época histórica en la que suceden los hechos narrados (siglo XVI, XXXV). Por lo general, el autor aporta en el texto referencias temporales explícitas o implícitas que permiten localizar temporalmente la acción, aunque también puede suceder que desee dotar a su narración de una validez universal (una fábula, por ejemplo) y evitará hacer referencia a este tiempo externo.
b) Tiempo interno: hará referencia tanto al tiempo cronológico de los acontecimientos narrados como a su duración. Cuando el narrador no cambia el orden cronológico de los acontecimientos , nos encontramos ante una NARRACIÓN LINEAL. Hay ciertas técnicas que nos permiten alterar el orden cronológico y la duración de los sucesos narrados: ANALEPSIS O FLASH BACK- PROLEPSIS- NARRACIÓN DE ACCIONES SIMULTÁNEAS- ELIPSIS O RESUMEN DE LOS ACONTECIMIENTOS-DIGRESIONES.

4. ESPACIO: Entendemos por espacio narrativo la reelaboración que el autor hace del lugar donde acontece la historia. Las narraciones del lugar suelen ser fundamentales para crear en la narración un determinado AMBIENTE (conjunto de circunstancias de todo tipo que envuelven a los personajes y que los condicionan). El espacio puede estar concebido en el relato de una manera objetiva o subjetiva.

5. PERSONAJES:

Según su función

PRINCIPALES
PROTAGONISTA
Individual
Colectivo
ANTAGONISTA
SECUNDARIOS
FUGACES
Según su caracterización
Personajes redondos
Personajes planos

martes, 26 de abril de 2011

TEXTOS DE PROUST-MANN-KAFKA

"En busca del tiempo perdido"

1. Por el camino de Swann

  Claro que Swann no tenía conciencia directa de lo grande de ese amor. Cuando quería medirlo le parecía a veces empequeñecido, casi reducido a la nada; por ejemplo, lo poco que le atraían, casi la repulsión que le inspiraban, los rasgos fisonómicos de Odette antes de que se enamorara de ella, y que volvía a sentir algunos días. «Verdaderamente, voy progresando», decía; «ayer no sacaba ningún gusto de estar en su cama, es curioso; y hasta me parecía fea.» Y era sincero, sí; pero su amor iba bastante más allá de las regiones del deseo físico. Y no entraba en él, por mucho, la persona de Odette. Cuando sus miradas tropezaban con la fotografía de Odette que tenía encima de la mesa, o cuando la propia Odette iba a verlo, le costaba trabajo identificar la figura de carne o de cartulina con la preocupación dolorosa y constante que en su seno sentía. Exclamaba con asombro: «¡Es ella!»; como si de repente nos mostraran exteriorizada, ahí delante de nosotros, una enfermedad que padecemos, y no la encontráramos parecida a la nuestra. «¡Ella!» Swann se preguntaba qué era eso de «¡ella!», porque guarda mucha mayor semejanza con el amor y con la muerte que esas cosas que tanto se repiten, el interrogar, cada vez más, por miedo a que se nos escape, el misterio de la personalidad. Y aquella enfermedad amorosa de Swann se había multiplicado tanto, se enlazó tan íntimamente a todas las costumbres de Swann, a sus actos, a su pensamiento, a su salud, a su sueño, a su vida, a lo que deseaba para después de la muerte, que ya no formaba más que un todo con él, que no era posible arrancársela sin destruirlo a él, o, para decirlo en términos de cirugía, su amor ya no era operable.
2. Sodoma y Gomorra

Pero ya no habría en adelante ningún día nuevo para mí y me despertaría el deseo de una desconocida felicidad y solo prolongaría mis sufrimientos hasta que ya no tuviese fuerzas para soportarlo. La verdad de lo que me había dicho Cottard en el casino de Parville ya no me ofrecía dudas. Lo que temiera y sospechara vagamente mucho tiempo de Albertine, lo que deducía mi instinto de todo su ser y lo que me había hecho negar poco a poco mis razonamientos conducidos por mi deseo, era verdad. Detrás de Albertine, ya no veía las montañas azules del mar, sino el cuarto de Montjouvain en donde caía en brazos de la señorita de Vinteuil con esa risa en que se oía algo así como el ignorado sonido de su goce. Porque, linda como lo era Albertine, ¿cómo podía ser que la señorita de Vinteuil, con sus aficiones, no hubiese pedido satisfacerlas? Y la prueba de que a Albertine no le había chocado y consintió, es que no se disgustó y su intimidad no dejaba de crecer. Y ese movimiento gracioso de Albertine al posar su barbilla sobre el hombro de Rosamunda, mirándola entre sonrisas y dándole un beso en el cuello, ese movimiento que me recordó la señorita de Vinteuil y para cuya interpretación vacilara en admitir que una misma línea trazada por un gesto produjera obligatoriamente una misma inclinación, ¿quién sabe si Albertine no lo había aprendido sencillamente de la señorita de Vinteuil? Poco a poco el cielo apagado se iba encendiendo. Yo, que hasta entonces no me había despertado nunca sin sonreírle a las cosas más humildes, al tazón de café con leche, al ruido de la lluvia, al tronar del viento, sentí que ese día que iba a despertarse dentro de un instante y todos los días que lo seguirían, ya no me volverían a traer la esperanza de una felicidad desconocida, sino la prolongación de mi martirio. Me interesaba todavía la vida; sabía que solo me cabía esperar lo más cruel. Corrí al ascensor, a pesar de la hora indebida, para llamar al ascensorista que ejercía las funciones de sereno nocturno, y le pedí que fuera a la habitación de Albertine, que le dijera que tenía que comunicarle algo importante y si podía recibirme. «–La señorita prefiere venir –vino a contestarme–. Estará aquí dentro de un instante.» Y pronto, en efecto, Albertine entró, de bata.

3. El tiempo recobrado

  Pero si un ruido, un olor, ya oído o respirado antes, se oye o se respira de nuevo, a la vez en el presente y en el pasado reales sin ser actuales, ideales sin ser abstractos, en seguida se encuentra liberada la esencia permanente y habitualmente oculta de las cosas, y nuestro verdadero yo, que, a veces desde mucho tiempo atrás, parecía muerto pero no lo estaba del todo, se despierta, se anima al recibir el celestial alimento que le aportan. Un minuto liberado del orden del tiempo ha recreado en nosotros, para sentirlo, al hombre, liberado del orden del tiempo. Y se comprende que este hombre sea confiado en su alegría, aunque el simple sabor de una magdalena no parezca contener lógicamente las razones de esa alegría; se comprende que la palabra «muerte» no tenga sentido para él; situado fuera del tiempo, ¿qué podría temer del futuro? Pero este falso efecto que me acercaba un momento del pasado incompatible con el presente, este falso efecto no duraba. Por supuesto, se pueden prolongar los espectáculos de la memoria voluntaria que no nos exige más fuerzas que la de hojear un libro de estampas. Así, en otro tiempo, por ejemplo el día en que tenía que ir por primera vez a casa de la princesa de Guermantes, desde el patio soleado de nuestra casa de París miraba yo perezosamente, a elección mía, ya la plaza de la iglesia de Combray, o ya la playa de Balbec, como hubiera yo ilustrado el día que hacía hojeando un cuaderno de acuarelas tomadas en los diversos lugares donde había estado; y, con un egoísta placer de coleccionista, me dije catalogando así las ilustraciones de mi memoria: «La verdad es que he visto cosas bellas en mi vida».

"La montaña mágica"

En la novela se da a menudo la exposición y confrontación de las ideas de los personajes sobre diversos temas, con frecuencia profundos. Pero el paradigma de discusión filosófica lo mantiene Hans con dos personajes: Settembrini y Naphta, que dialogan entre ellos y con el protagonista, y que tienen temperamentos e ideas muy distintos, casi siempre opuestos. A lo largo de muchas páginas estos dos personajes discurren sobre política, filosofía, historia, arte o religión:

–El señor Settembrini –intervino Naphta– omite mencionar que el idilio roussoniano es una adaptación torpe y racionalista de la doctrina cristiana, el estado civil del hombre que no reconoce el pecado ni la sociedad, de su origen divino y de su unión íntima con Dios, unión que de nuevo debe realizarse. Pero el restablecimiento del reino de Dios, después de la disolución de todas las formas terrestres, se halla situado en un punto en que la tierra y el cielo, o aquello que es accesible y sobrenatural convergen. La salvación es trascendente, y en lo que se refiere a su República universal capitalista, mi querido doctor, es muy extraño que hable usted de «instinto» al referirse a ella. El ser instintivo se halla absolutamente relacionado con lo que es racional, y Dios mismo ha dotado a los hombres de instinto natural que los incita a separarse los unos de los otros en Estados diferentes. La guerra…
–La guerra –exclamó Settembrini–. Incluso la guerra, señores, se ha visto ya obligada a servir al progreso, como sin duda admitirán si recuerdan ciertos acontecimientos de su época preferida; me refiero a las Cruzadas. Estas guerras civilizadoras favorecieron acertadamente el mundo de las relaciones económicas y comerciales entre los pueblos y reunieron a la humanidad occidental bajo el signo de una idea.
–Se muestra muy tolerante con la idea. Quiero, pues, rectificar sus palabras cortésmente informándole de que las Cruzadas, al margen del impulso que dieron al comercio, ejercieron una influencia que no tiene nada de internacional; por el contrario, enseñaron a los pueblos a distinguirse entre ellos, y fomentaron el desarrollo de la idea del Estado nacional.
–Muy exacto, en lo que se refiere a las relaciones del pueblo con el clero. Sí, en aquellos tiempos el sentimiento del honor del Estado nacional comenzó a fortificarse, saliendo al paso de la presunción jerárquica…


La estancia de Hans en el sanatorio se prolonga indefinidamente. Durante sus primeras semanas, Hans estaba muy irritado con una mujer rusa porque cerraba la puerta del comedor con un portazo; con el paso del tiempo, Hans se acaba por enamorar de esta mujer, llamada Clawdia Chauchat, la cual está casada pero vive en el sanatorio sin su marido. Hans se apasiona intensamente por ella y le hace una febril declaración de amor, pero sabe que su relación es imposible porque ella está casada y porque se va a marchar del sanatorio:
–Te amo –balbuceó–, te he amado siempre, pues tú eres el Tú de mi vida, mi sueño, mi destino, mi deseo, mi eterno deseo.
–¡Vamos, vamos! –dijo ella–. ¡Si tus preceptores te viesen!
–Me tendría sin cuidado, me tienen sin cuidado todos esos Carducci, la República elocuente, el progreso humano en el tiempo, pues ¡te amo!
Ella acarició dulcemente con la mano los cabellos cortados al rape en la nuca.
–Pequeño burgués –dijo–. Lindo burgués de la pequeña mancha húmeda. ¿Es verdad que me amas tanto?
Exaltado por ese contacto, ya sobre las dos rodillas, la cabeza echada hacia atrás y los ojos cerrados, él continuó hablando:
–Oh, el amor, ¿sabes…? El cuerpo, el amor, la muerte, esas tres cosas no hacen más que una. Pues el cuerpo es la enfermedad y la voluptuosidad, y es el que hace lamuerte; sí, son carnales ambos, el amor y la muerte, ¡y ese es su terror y su enorme sortilegio! Pero la muerte, ¿comprendes?, es, por una parte, una cosa de mala fama, impúdica, que hace enrojecer de vergüenza; y por otra parte es una potencia muy solemne y muy majestuosa (mucho más alta que la vida riente que gana dinero y se llena la panza; mucho más venerable que el progreso que fanfarronea por los tiempos) porque es la historia, y la nobleza, y la piedad, y lo eterno, y lo sagrado, que hace que nos quitemos el sombrero y marchemos sobre la punta de los pies… De la misma manera, el cuerpo, también, y el amor del cuerpo, son un asunto indecente y desagradable, y el cuerpo enrojece y palidece en la superficie por espasmo y vergüenza de sí mismo.

domingo, 24 de abril de 2011

MARCEL PROUST- THOMAS MANN- FRANZ KAFKA

3. MARCEL PROUST

   La novela psicológica ya había sido apuntada por los grandes maestros del siglo XIX: Stendhal, Zola y, sobre todo, Dostoievski habían trazado un camino de ineludible tránsito para los narradores de las primeras décadas del siglo XX, y solo los vanguardistas osaban apartarse hacia sendas inexploradas. Así, la irrupción de un novelista adinerado, caprichoso, enfermizo y refinado como Proust no fue, en principio, tomada muy en serio.
  No  obstante, Marcel Proust estaba llamado a consagrar su vida a la redacción  de una de las grandes obras de todos los tiempos, En busca del tiempo perdido. Novela-río por excelencia, la trama gira en torno a un narrador que en el primer volumen ya plantea la alternativa de dos senderos, el de Germantes (la aristocracia) y el de Méséglise o de los Swan (la pasión amorosa). Asistido en su formación por un artista y por un músico, el narrador va desarrollando un enorme monólogo interior en primera persona, técnica muy adecuada para indagar en la complejidad psicológica de los personajes y que le permite aportar multitud de elementos autobiográficos. No es, sin embargo, una novela centrada en la trama o en los personajes: la obra recrea un universo completo. En el último volumen compara su proceso de creación con el de una catedral gótica, cuyos planos iniciales van cambiando su laberíntica estructura a medida que avanza la construcción. Los mecanismos que utiliza para ello (minuciosas descripciones, incorporación de sensaciones y recuerdos, periodos sintácticos inusualmente largos y complejos) convierten su lectura en una tarea indudablemente ardua.
  Las acciones se van presentando como los distintos elementos de una sinfonía para conformar una realidad literaria única. Coincide con el impresionismo en la caracterización de los personajes de manera fragmentaria a través de sus gustos, aficiones y hábitos o mediante la interpolación de evocaciones.
  Tal vez sea el concepto de evocación el que mejor defina la obra: se evocan olores, sabores, colores, sensaciones, formas, entregándose a la memoria sensorial, más que a la reflexión, para mostrar esa realidad del presente-pasado. Asistimos, en definitiva, a un experimento filosófico emparentado con las teorías sobre el conocimiento y la memoria de Bergson o con la recuperación de parcelas del subconsciente de Freud.

4. THOMAS MANN

  En la Alemania industrial y militarizada de principios del siglo XX la técnica expresionista domina la pintura, el cine y la producción novelística de escritores como Kafka, Herman Hesse, Robert Musil, Ivan Goll, etc.
 Ciertos sectores de la crítica literaria sitúan a la obra de Thomas Mann, por su perfeccionismo y por sus ataques a la vanguardia más atrevida, como el estertor de la novela burguesa; sin embargo, es evidente que este autor es uno de los grandes innovadores de la novela, si bien su propuesta no se centra en la experimentación lingüística como la de Joyce o Proust, sino en la incorporación de la reflexión a la narración. Thomas Mann rechaza un arte deshumanizado que carezca de compromiso con la realidad, incluida la realidad propia que soporta lo soñado y lo anhelado.
  Desde su primera novela, Los Buddenbrook, existe una análisis preciso del hombre burgués de su tiempo, en tensión con la sociedad y consigo mismo. Esa tensión llega también a Muerte en Venecia o Doctor Faustus, y descubrimos que se repite la reflexión por el papel del artista y la indagación en su compleja psicología, el eterno debate entre arte y vida. Entre sus grandes obras es La montaña mágica la más destacable, tanto por la profundidad de sus indagaciones filosóficas (tiempo, muerte, dolor, pasión, etc.) como por la pulcritud de su lenguaje; en ella se incorporan elementos simbólicos y se adopta un punto de vista distante e irónico, dejando el peso de la acción al diálogo. Puede considerarse una novela total. 


5. FRANZ KAFKA

   Franz Kafka ha legado el adjetivo kafkiano como sinónimo de absurdo o angustioso. Así es el mundo literario del autor checo, especializado en captar lo que de raro y siniestro hay en la realidad, comenzando por la condición del hombre contemporáneo (La metamorfosis) y pasando por la administración de justicia (El proceso) o la creación de leyes (El castillo). Lo onírico, lo subconsciente y lo irracional emerge, de acuerdo con la técnica expresionista de hacer aflorar los sentimientos más profundos. En Kafka, esos sentimientos son la angustia, la soledad, la frustración y la culpabilidad, y los estampa en una prosa fría, corta, tajante y sin adornos, pero de una eficacia expresiva descomunal. Pese a la brevedad de su obra y de que solo fuese conocida gracias a la infidelidad de un amigo, que la publicó sin permiso tras su muerte, es, sin duda alguna, una de las visiones literarias más influyentes de todo el siglo XX.    

lunes, 18 de abril de 2011

JAMES JOYCE Y VIRGINIA WOOLF

  Cuando se acerca el final del siglo XIX tiene lugar la crisis de la novela realista: la narración objetiva de unos hechos, ordenados cronológicamente, efectuada por un narrador omnisciente que se recrea en la descripción exhaustiva de ambientes y personajes es puesta en cuestión.
  En los primeros años del siglo XX nos encontramos con:

a)      Novelistas que siguen fieles al Realismo. Ejemplos: Pío Baroja, Blasco Ibáñez, Henry Sienkiewicz- Quo vadis?, Edith Wharton- La edad de la inocencia, Henry James, Joseph Conrad- El corazón de las tinieblas, Arthur Conan Doyle, Julio Verne, H.G. Wells, Rudyard Kipling, Mark Twain.
b)      Novelistas que, sin cuestionarse los principios fundamentales del Realismo, lo superan o lo hacen evolucionar hacia subgéneros nuevos (existencialismo, neorrealismo italiano, realismo socialista, realismo de la posguerra española, realismo mágico, novela histórica, etc).
c)      Los novelistas que rompen abierta y violentamente con las posiciones artísticas dominantes, poniendo el acento en la forma y desentendiéndose de todo lo que no sea puro arte (vanguardistas, generación perdida americana, novela experimental, etc.)

NARRATIVA EN LENGUA INGLESA

1. JAMES JOYCE


  El fin del Realismo mediante una obra volcada definitivamente en la forma, donde el estilo se convierte en el protagonista absoluto, llega sin duda con Joyce. Él es considerado el padre de la novela contemporánea. Sus novelas, que han dado lugar a cientos de estudios críticos e interpretaciones, tiene la ciudad de Dublín como escenario, y sobre sus calles se va trazando una innovadora epopeya de la contemporaneidad.
  Mientras que en Dublinenses percibimos muerte y pesimismo, Retrato de un artista adolescente está repleto de elementos autobiográficos a través del protagonista, Stephen Dedalus, quien también aparece en Ulises. Esta última obra es una de las cimas artísticas de la literatura. El propio Joyce asistió a las interpretaciones que la crítica hizo sobre sus personajes (Bloom, Molly y Dedalus vendrían a ser Ulises, Penélope y Telémaco) y, sobre todo, sobre las trasposición de escenarios y episodios de la Odisea a su novela.
  Una de las claves de Ulises es el manejo del tiempo, elemento recurrente en la narrativa contemporánea. La acción transcurre en 24 horas, lo que da pie a exhaustivas y documentadas descripciones, pero, especialmente, a un rápido fluir de sentimientos, sensaciones y diálogos entre los personajes, que aun confundiéndose con la voz narrativa (mediante la incorporación de corrientes de conciencia y monólogo interior), manifiestan toda su complejidad psicológica y vital presentando rasgos personales y lingüísticos propios.

http://www.cadenaser.com/articulo/cultura/Guia/perder/miedo/Ulises/Joyce/csrcsrpor/20040616csrcsrcul_1/Tes/

CAPÍTULO 6: "HADES"

  El señor Bloom admiró el opulento volumen del vigilante. Todos quieren estar en buenos términos con él. Un tipo decente, John O'Connell, de buena extracción. Llaves: como el anuncio de Keyes: sin miedo de que nadie salga, sin controles de salida. Habeat corpus. Tengo que encargarme de ese anuncio después del funeral. ¿Escribí Ballsbridge en el sobre que usé para disimular cuando ella me descubrió escribiéndole a Marta? Espero que no esté tirado en la oficina de cartas sin reclamo. Estaría mejor afeitado. Barba que ya sale gris. Esa es la primer señal cuando los pelos se vuelven grises y viene el malhumor. Hilos de plata entre el gris. Imaginate ser su mujer. Me pregunto cómo tiene el tino de declararse a una muchacha. Vamos, vivamos en el cementerio. Mostrale eso. Podría emocionarla al principio. Cortejar la muerte… Sombras nocturnas rondando por aquí con todos los muertos desperezándose en los alrededores. Las sombras de las tumbas cuando los camposantos bostezan y Daniel O'Connell debe ser un descendiente supongo quién era quien solía decir decir que era un raro de raza gran católico igual como un gran gigante en la oscuridad. La luz mala. Emanaciones de las tumbas. Quiero mantener su mente fuera de esto, para poder pensar algo. Las mujeres especialmente son tan susceptibles. Uno les cuenta una historia de fantasmas en la cama para hacerlas dormir. ¿Viste un fantasma alguna vez? Bueno, yo sí. Era una noche de boca de lobo. El reloj estaba por dar las doce. Sin embargo besarían dadas las circunstancias adecuadas. Putas en tumbas turcas. Si uno las pesca de jóvenes, pueden aprender cualquier cosa. Uno podría llevarse una joven viuda por acá. A los hombres les gusta eso. Amor entre las tumbas. Romeo. Especias de placer. En el medio de la muerte estamos vivos. Ambos extremos se tocan. Tentando a los pobres muertos. El aroma de bifes a la plancha para los hambrientos royéndoles las entrañas. Ganas de vivificar gente. Molly queriéndolo hacer en la ventana. Igual tiene ocho hijos.
  Ya ha visto una buena cantidad de gente ir bajo tierra en su momento, tirados a su alrededor campo tras campo. Camposantos. Más lugar si se los entierra parados. Sentados o de rodillas no se podría. ¿Parados? La cabeza podría asomar un día en algún terremoto con la mano señalando. Todo el campo debe estar panalizado: celdas oblongas. Y lo mantiene muy prolijo también: corta el pasto y los bordes. El intendente Gamble llama Monte Jerome a su jardín. Y lo es. Deben ser flores del sueño. Los cementerios chinos donde crecen tulipanes gigantes producen el mejor opio, me dijo Mastiansky. Los Jardines Botánicos están ahí mismo. Es la sangre que se hunde en la tierra la que da nueva vida. La misma idea esos judíos que dijeron haber matado al niño cristiano. Todo hombre su precio. El grueso cadáver bien preservado de un caballero, epicúreo, invaluable para un jardín frutal. Una ganga. Por la carcasa de William Wilkinson, auditor y contador, recientemente fallecido, tres libras, trece chelines con seis. Agradecido.
  Me animo a decir que el suelo engordaría con el abono de cadáveres, huesos, carne, uñas, osarios. Horribles. Se vuelven verdes y rosas, se descomponen. Se pudren rápido en la húmeda tierra. Los flacos viejos son más duros. Luego como ceroso con aspecto de queso. Luego se empieza a poner negro, una melaza que se les rezuma. Luego se secan. Mariposas de la muerte. Claro que las células o lo que sean siguen viviendo. Van cambiando. Viven prácticamente para siempre. Nada para comer se comen ellas mismas.
   Pero deben criar un infierno de gusanos. El suelo debe formar remolinos con ellos. Se le arremolina la cabeza a uno. Esas lindas chicas en la playa. El parece bastante contento con esto. Le da una sensación de poder ver a los demás ir bajo tierra primero. Me pregunto cuál es su mirada sobre la vida. Cuenta sus chistes, además: lo pone de lo más feliz. Aquel del boletín. Spurgeon se fue al cielo a las 4 AM esta mañana. Las 11 AM (hora de cerrar). No llegó todavía. Pedro. Los mismos muertos los tipos de alguna manera querrían oír algún chiste o las mujeres saber qué está de moda. Una pera jugosa, o un jugo de frutas para damas, caliente, fuerte y dulce. La humedad, afuera. Hay que reírse a veces así que mejor hacerlo así. Los sepultureros en Hamlet. Muestra el profundo conocimiento del corazón humano. No se anima a contar un chiste de muertos por dos años, al menos. De mortuis nil nisi prius. Primero hay que salir del duelo. Difícil imaginarse su funeral. Parece como un chiste. Leer el propio obituario dicen que uno vive más. Como que da nuevos ímpetus. Un nuevo contrato para vivir.

2. VIRGINIA WOLF Y EL CÍRCULO DE BLOOMSBURY


   Coetánea de Joyce,  fue el centro de un grupo de intelectuales progresistas y escépticos, el Círculo de Bloomsbury, que perseguía el placer estético y el conocimiento a través de la creación (E.M.Foster, T.S.Eliot, Bertrand Russell, M. Keynes).
   En la novela de Virginia Woolf se percibe una gran intensidad lírica aprehendida mediante la dispersión de elementos evocadores (paisajes, objetos, recuerdos, intervenciones de los personajes). Lo que queda no es la trama, sino el “halo luminoso”. Todas las experiencias sensoriales se acumulan y determinan una percepción diferente, muy cercana a la poesía. Es comprensible, por tanto, que el monólogo interior y las corrientes de conciencia, tanto como la mezcla de pasado, presente y futuro, aparezcan en sus mejores obras (Al faro, Las olas, Entre los actos, etc.)

FRAGMENTO DE LA PELÍCULA "LAS HORAS":
http://www.youtube.com/watch?v=F0p1_HnBBYU

FRAGMENTO DE "LAS OLAS"
 "El sol no había nacido todavía. Hubiera sido imposible distinguir el mar del cielo, excepto por los mil pliegues ligeros de las ondas que le hacían semejarse a una tela arrugada. Poco a poco, a medida que una palidez se extendía por el cielo, una franja sombría separó en el horizonte al cielo del mar, y la inmensa tela gris se rayó con grandes líneas que se movían debajo de su superficie, siguiéndose una a otra persiguiéndose en un ritmo sin fin. Al aproximarse a la orilla, cada una de ellas adquiría forma, se hinchaba y se rompía arrojando sobre la arena un delgado velo de blanca espuma. La ola se detenía para alzarse enseguida nuevamente, suspirando como una criatura dormida cuya respiración va y viene inconscientemente. Poco a poco, la franja oscura del horizonte se aclaró: se hubiera dicho un sedimento depositado en el fondo de una vieja botella, dejando al cristal su transparencia verde. En el fondo, el cielo también se hizo translúcido, cual si el sedimento blanco se hubiera desprendido o cual si el brazo de una mujer tendida debajo del horizonte hubiera alzado una lámpara, y bandas blancas, amarillas y verdes se alargaron sobre el cielo, igual que las varillas de un abanico. Enseguida la mujer alzó más alto su lámpara y el aire pareció dividirse en fibras, desprenderse de la verde superficie en una palpitación ardiente de fibras amarillas y rojas, como los resplandores humeantes de un fuego de alegría. Poco a poco las fibras se fundieron en un solo fluido, en una sola incandescencia que levantó la pesada cobertura gris del cielo transformándola en un millón de átomos de un azul tierno. La superficie del mar fue adquiriendo gradualmente transparencia y yació ondulando y despidiendo destellos hasta que las franjas oscuras desaparecieron casi totalmente. El brazo que sostenía la lámpara se alzó todavía más, lentamente, se alzó más y más alto, hasta que una inmensa llama se hizo visible: un arco de fuego ardió en el borde del horizonte, y a su alrededor el mar ya no fue sino una sola extensión de oro. La luz golpeó sucesivamente los árboles del jardín iluminando una tras otra las hojas, que se tornaron transparentes. Un pájaro gorjeó muy alto; hubo una pausa: más abajo, otro pájaro repitió su gorjeo. El sol utilizó las paredes de la casa y se apoyó, como la punta de un abanico, sobre una persiana blanca; el dedo del sol marcó sombras azules en el arbusto junto a la ventana del dormitorio. La persiana se estremeció dulcemente. Pero todo en la casa continuó siendo vago e insustancial. Afuera, los pájaros cantaban sus vacías melodías. "
  Además de Joyce y Virginia Woolf, hay que destacar a D.H. Lawrence (El amante de lady Chatterley), George Orwell (1984, Rebelión en la granja), Aldous Huxley (Un mundo feliz) o a los fundadores del círculo de Inklings, J.R. Tolkien (El señor de los anillos) y C.S. Lewis (Crónicas de Narnia).

domingo, 17 de abril de 2011

PROPUESTA PARA IR AL TEATRO

   En el Teatro Fernán Gómez están representando, hasta el 1 de mayo, "Casa de muñecas" de Ibsen. Es una obra clásica que enlaza con los temas de Literatura que estudiaremos en el tercer trimestre, así que os propongo ir algún día de la semana después de las vacaciones. La entrada de grupo sale a 15 euros, la información sobre la obra está en esta página web: http://teatrofernangomez.esmadrid.com/espectaculo/?id=658. 

  Escribidme al correo para apuntaros (iszapardiel@hotmail.com) y señaladme qué día os viene mejor: 28, 29 o 30 de abril. 

  Otra obra a la que también podéis apuntaros escribiéndome al correo es "El evangelio según San Juan" de El Brujo el día 3 de mayo (20 euros). La información sobre esta obra está en esta página web: http://www.elbrujo.es/evangelio/index.php
  

sábado, 9 de abril de 2011

GUÍA DE LECTURA DE LA METAMORFOSIS




1.- Gregorio Samsa se despierta,

  • ¿Cómo es el insecto en el que se ha convertido?
  • ¿Son meramente humanas sus impresiones o se mezclan con instintos de insecto?
  • ¿Asume su nueva condición?
  • ¿Qué alusiones relativas al tiempo enmarcan la escena?
  • Explica cómo van apareciendo los otros miembros de la familia, así como sus diferentes reacciones ante el insólito acontecimiento
  • Gregorio trata de abandonar la cama. Aunque él piensa en términos humanos, ¿son humanas las reacciones d su cuerpo? ¿Por qué no pide ayuda para levantarse?
  • Llega el encargado del almacén donde trabaja Gregorio para averiguar las causas del retraso, ¿contribuye este hecho a aumentar la sensación de angustia y pesadilla?
  • Comenta la reacción del padre, de la madre y de la hermana ¿Desde dónde le hablan?
  • ¿El tono y el lenguaje empleado por el encargado del almacén están acordes con su carácter y condición?
  • Las palabras de Gregorio se vuelven ininteligibles para los demás, ¿qué reacción suscita esto en su familia?
  • ¿Cómo consigue Gregorio abrir la puerta?
  • Comenta las distintas reacciones que provoca su visión.
  • ¿De qué habla Gregorio a continuación?
  • Mientras el encargado huye por la escalera, ¿qué hacen el padre y la madre? ¿Por qué el padre quiere que Gregorio se meta atravesando en la habitación?

2.- La acción transcurre ahora al anochecer,

  • ¿Cómo se siente Gregorio?
  • ¿Cómo transcurre la primera noche después de su transformación?
  • ¿Qué actitud adopta Gregorio ante lo irremediable de su estado?
  • ¿Quién es la primera persona en visitarle por la mañana?
  • ¿Cómo influye la metamorfosis de Gregorio en la vida familiar?
  • ¿Interpreta correctamente Gregorio el comportamiento de su hermana cuando le lleva y le retira la comida? Por otra parte, ¿la comida que le llevan permite deducir lo que piensa la familia respecto a la condición de Gregorio?
  • ¿Qué delatan las predilecciones de Gregorio en materia de comida?
  • Observa la incomunicación que se establece entre Gregorio y su familia
  • ¿Qué prevenciones toma la familia con respecto a Gregorio? ¿Se avergüenzan de él?
  • Mediante un salto atrás en el tiempo conocemos los comienzos “brillantes” de Gregorio en la empresa, sus proyectos para con su hermana, etc. ¿De qué se entera ahora Gregorio al escuchar la conversación de su familia? ¿Cómo reacciona?
  • Por qué la hermana abre violentamente la ventana de la habitación de Gregorio? ¿Cómo puede interpretarse la reacción de Gregorio ante este hecho?
  • ¿Por qué Gregorio quiere ocultarse de la vista de su hermana?
  • ¿Cómo se entretiene Gregorio?
  • ¿Qué siente al ver que le vacían de muebles su habitación?
  • ¿Cuáles son las primeras palabras que la hermana le dirige después de la metamorfosis de Gregorio? ¿Qué delatan estas palabras y el gesto que las acompaña?
  • Comenta la reacción del padre al ver a Gregorio fuera de la habitación ¿Cómo ve  éste la figura del padre?

3.-
  • Comenta los sentimientos de la familia, y en especial del padre, a raíz del incidente de la manzana ¿En qué medida lo aceptan?
  • ¿Cuál es la verdadera causa de que la familia no se cambie de casa? Observa el contraste entre la situación floreciente de la familia con los nuevos trabajos yla patética y desesperada situación de Gregorio
  • Compara el estado físico de Gregorio y el de su habitación, convertida en el trastero de la casa.
  • ¿Cómo reaccionan los padres y los huéspedes al ver a Gregorio en el comedor mientras la hermana toca el violín?
  • ¿Cuáles son los pensamientos de Gregorio cuando oye el violín, ante el desinterés de los huéspedes?
  • ¿Qué piensa la hermana de Gregorio?
  • Comenta la reacción de la familia ante la muerte de Gregorio

4.- Da tu opinión sobre las siguientes cuestiones:

  • El estilo claro y preciso frente a lo absurdo del tema
  • El tema de la terrible inseguridad del ser humano, que puede acabar transformándose en un monstruoso insecto y perder así su identidad. Esta pesadilla hiere la insensibilidad del lector y provoca un sentimiento de angustia de la existencia, derivada de la insignificancia y banalidad del ser humano.
  • Gregorio Samsa como metáfora del ser humano acorralado y del absurdo de la vida.
  • Técnica narrativa aparentemente sencilla pero de gran efecto: se trata de mezclar lo asombroso y excepcional con lo cotidiano. Y, especialmente, contar algo que es absurdo e insólito con la lógica de la naturalidad.

5.- Comenta el siguiente párrafo de Jorge Luis Borges sobre Kafka ¿Puede aplicarse a La Metamorfosis?

La indiscutible virtud de Kafka es la invención de situaciones intolerables (…) El argumento y el ambiente son lo esencial; no las evoluciones de la fábula, ni la penetración psicológica”

6.- Es de uso frecuente el adjetivo kafkiano. Después de la lectura ¿cómo lo definirías?

7.- Describe una escena o situación que pueda calificarse con este adjetivo

LA CRISIS DE 1914. LA CONSOLIDACIÓN DE UNA NUEVA FORMA DE ESCRIBIR EN LA NOVELA

 
 La civilización liberal se derrumba con la Primera Guerra Mundial (1914-1918) que, además de provocar el horror como nunca antes por el enorme número de muertos y heridos, dejó a los países vencedores- excepto EEUU- en la bancarrota y ocasionó el desmoronamiento de buena parte de los regímenes europeos. Tras la guerra, Europa se hunde en una depresión económica que propicia el auge del fascismo italiano y de otros movimientos autoritarios; en cambio, los EEUU, lejos de los campos de combate y habiéndose incorporado al bando aliado tiempo después de comenzar los enfrentamientos, disfruta por estas fechas de un crecimiento económico que le permitirá situarse como la primera potencia mundial. 
  Durante el transcurso de la guerra, en 1917, un acontecimiento conmovió al mundo: la revolución bolchevique de Rusia. Su importancia trascendía las fronteras nacionales: el objetivo era la revolución socialista mundial, empezando por los países más industrializados de Europa. Con este fin, se funda en 1919 la III Internacional, la consecuencia fue que se ahondó la brecha entre los reformistas socialdemócratas y los revolucionarios.
  En el campo del arte y de la cultura, el primer tercio del siglo XX es particularmente fértil. Se produce una explosión creativa, de cuya diversidad da idea la multitud de movimientos estéticos que se suceden y solapan en pocos años: son las vanguardias. Las corrientes vanguardistas se caracterizan por su afán experimental y su voluntad rupturista con respecto al arte anterior. En general, es en las artes plásticas donde se concreta más explítitamente el cambio con respecto a la tradición artística previa.
  Durante la Primera Guerra Mundial, España se mantuvo neutral. Pese a los extraordinarios beneficios empresariales obtenidos gracias a dicha neutralidad, la población se empobreció y se intensificó la lucha de clases, lo que culminó en la huelga general de 1917. En Barcelona, grupos anarquistas pasaron a la acción directa y organizaron atentados, a lo que respondió la patronal con bandas de pistoleros a sueldo. En 1920 se fundó el Partido Comunista de España. A esta tensión social se añadieron las consecuencias del anacrónico colonialismo español en el norte de África. Con el golpe militar de Primo de Rivera en 1923 termina la Restauración.
CARACTERÍSTICAS DE LA NARRATIVA DEL SIGLO XX: Que la novela ha sido el género literario por excelencia del siglo XX admite pocas dudas. Se ha dicho que con Stendhal llega a la culminación el tipo de narración que Cervantes elevó a rango de obra de arte. Al novelista del siglo XX le quedaría, por tanto, solo contar manejando ese juego de estructuras que los grandes narradores del pasado le habían legado. Sin embargo, cada vez que se anuncia el final de la novela como género surge una obra maestra nueva.
  En el discurso narrativo de este siglo nos encontramos con la negación absoluta del género, con intentos de renovación parcial o total, con críticos y creadores que han buscado nuevas denominaciones para lo que consideraban que no se ajustaba al modelo literario conocido como “novela”: antinovela, no-novela, novela nueva, nivola, novela lírica…El novelista ha incorporado el debate a su propia creación para hacer partícipe al lector y, en el otro extremo, nunca como en esta centuria se ha teorizado tanto sobre el hecho novelesco: Ortega y Gasset, Barthes, H. James, E.M. Foster, Todorov, Batjin, Genette, etc. A la postre, la única conclusión posible es que existen tantas “novelas del siglo XX” como novelistas o, lo que es lo mismo, en sentencia ya célebre de Camilo José Cela: “Novela es todo aquello que, editado en forma de libro, admite debajo del libro y entre paréntesis, la palabra novela”.
   Ante tal diversidad es fácil comprender la dificultad de establecer una caracterización tan general que resulte válida para todos los narradores de este siglo. Además, el ritmo vertiginoso de los acontecimientos  históricos y sociales es trasladable a lo literario: los movimientos, escuelas, hallazgos y modelos se suceden rápidamente, se solapan incluso, ofreciendo una convivencia de conceptos narrativos opuestos que arrojan, si cabe, más dificultad a esta pretendida caracterización. 

INFLUENCIA DE OTRAS ARTES EN LA NOVELÍSTICA DEL SIGLO XX

1. CINE: Novela y cine se retroalimentan, pues numerosas obras cinematográficas se han basado en grandes novelas (El nombre de la rosa  de Umberto Eco; Fahrenheit 451 de Ray Bradbury) y es frecuente la participación de novelistas en sus guiones (García Márquez, Steinbeck, Capote). 

Técnicas novelísticas influidas por el cine: saltos temporales (flashbacks), montaje cinematográfico, variación de planos, escenas simultáneas, cámara lenta…

2. MÚSICA: La relación entre la música y la literatura se ha cifrado en los valores rítmicos de la poesía o en la influencia de la ópera. 

3. PINTURA: Cuando la pintura abandona, con las vanguardias, el objetivo de ser reflejo de la realidad, la novela hace otro tanto, y encontramos también novela-collage (La mujer de las mil cabezas de Max Ernst); colaboraciones entre géneros, como las de Sonia Delaunay y Cendrars; reducciones cubistas que emparentan las greguerías y las “novelas de la nebulosa” de Gómez de la Serna con el cubismo o la etapa abstracta de Picasso; la novela objetivista de Robbe-Grillet se aproxima a la pintura geométrica de un Mondrian; grandes pintores que novelan, como Dalí, Picasso, Solana…Asimismo, la propia imagen asociada al texto o a la tipografía resultan, en ocasiones, fundamentales (El principito de Saint-Exupéry).

4. ARQUITECTURA: El replanteamiento de la relación espacio-tiempo ha permitido en el siglo XX llegar a lo fragmentario, a lo caótico, a lo no-lineal. En arquitectura, Frank Gehry o Daniel Libeskind fusionan arquitectura con narración escrita y visual; en literatura, Rayuela de Julio Cortázar es un edificio de pasillos laberínticos y formas ageométricas, donde podemos añadir y suprimir ciertos espacios.

TENDENCIAS
  1. Deshumanización, hermetismo en la búsqueda del “arte por el arte” huyendo de la realidad.
  2. Novela comprometida, social.
NARRADOR
El narrador omnisciente deja paso al narrador dubitativo, frecuentemente en primera persona. La duda se traslada al lector mediante el escepticismo o los titubeos del narrador.
PUNTO DE VISTA
Para alejarse de lo narrado, el narrador adopta diferentes puntos de vista: tan pronto desarrolla los hechos en calidad de testigo o transcriptor como incorpora el monólogo interior o se documenta con la meticulosidad del periodista o historiador.
TIEMPO Y ESPACIO
El tiempo desaparece hasta el punto de ocuparse de unos meses, de un día o de un breve instante. Así pues, se prima el espacio, incorporado con múltiples detalles u operando con valor simbólico, provisto de una nueva expresividad. Lo narrativo cede paso a lo descriptivo.
Ni el tiempo ni el espacio son lineales. El universo es relativo, fragmentario, caótico y la novela también: saltos en el tiempo, carencia de puntuación y párrafos, fragmentarismo, experimentación, etc.
ESCENARIO
La ciudad se convierte en el escenario por excelencia; en ocasiones, se convierte en verdadera protagonista de la obra.
PERSONAJES
Más centrada en el personaje que en los hechos, el protagonista es un antihéroe que se mueve desorientado y angustiado por la ciudad. Se trata de un personaje redondo, que a veces está teñido de autobiografismo y bajo cuya perspectiva psicológica se narra la acción, pero que en muchas ocasiones forma parte de una masa, como en la novela coral.
METALITERATURA
Existe una reflexión constante sobre la tarea de narrar que, en ocasiones, da lugar a apostillas, anotaciones o trabajos críticos de los propios creadores, pero que, en muchas otras, se incorporan a la propia novela.